¿Por qué la astronomía es tan importante para nuestras vidas?

Esto es algo que digo siempre que tengo la ocasión: la astronomía es de vital importancia para la construcción de nuestro carácter y personalidad.

A día de hoy, la sociedad en general está más aletargada en esta rama de la ciencia porque, para empezar, vivimos en una época donde lo superfluo cobra mayor trascendencia en detrimento de la reflexión serena. Además, la desenfrenada contaminación lumínica han destruido el mínimo interés que quedara acabando así con una tradición milenaria.

Es inevitable, llegado a este punto, adjuntar el siguiente vídeo, donde se muestra claramente cómo se ve el cielo cuando las condiciones son óptimas:

Cuando uno observa detenidamente el vídeo, la primera palabra que se nos viene a la cabeza es grandiosidad. Las imágenes aquí mostradas nos inclinan forzosamente a la humildad.

Pero sin duda lo que nunca me deja de asombrar de la astronomía, es que resulta muy anti-intuitiva, hecho por el cual también se aleja de nuestra vida cotidiana, por su difícil comprensión. Nos demuestra de manera silenciosa que nuestra intuición se ha forjado en una prisión, y por ello cuando nos liberamos de los grilletes que nos mantienen encarcelados, cuesta entender la realidad que se extiende más allá.

La verdad es que cuando descubres cada uno de los secretos de la astronomía, te absorbe inevitablemente. Yo mismo desconocía hasta hace poco gran parte de lo que sé ahora sobre este campo científico. Gracias al trabajo de increíbles divulgadores científicos, cuyo trabajo permiten el acceso de estas ramas tan oscuras de la ciencia a la población en general, se me abrió un mundo que ahora me fascina.

Es tan simple como entender que nosotros, por muy distintos que nos veamos de los cuerpos celestes, venimos de allí arriba; que los procesos que ocurren en las estrellas permitieron la fabricación de elementos más pesados como el carbono, el oxígeno, el fósforo, el hierro, el nitrógeno, etc.; elementos que constituyen los ladrillos de la vida.

Cuando una estrella muere, esparce todo este material por el espacio para que la gravedad, con el paso de miles de millones de años, realice el resto del trabajo. Como bien decía el gran Carl Sagan:

"Somos el medio para que el cosmos se conozca a sí mismo."

Aquí radica en su mayor parte la importancia de la astronomía, por lo que es un craso error desligarnos automáticamente por mera intuición de los cuerpos celestes. Esta perspectiva es tan humilde, y "terrible" en un principio, que el ser humano siempre ha deseado verse en una posición privilegiada en el universo, y se ha necesitado el paso de milenios para que realmente nos diéramos cuenta de que no era así.

El único privilegio del que gozamos, y no por ello menos importante, es que poseemos conciencia; somos capaces de entender en un grado todavía bastante limitado la inmensidad que nos rodea, y el conocimiento reflexivo de esta gran verdad enriquece nuestras vidas sobremanera.

La Tierra, indicada en la imagen con una flecha, vista desde Saturno. Imagen compuesta por varias tomas realizadas por la sonda Cassini el 10 de octubre de 2013.

Si la gente de verdad entendiera la importancia de las líneas que estoy escribiendo, muchas incongruencias de la vida diaria acabarían desmoronándose per se, y no tengo ni la menor duda de ello.

El sentimiento de paz y tranquilidad que siempre ha perseguido a los astronautas afortunados de ver el mundo desde una perspectiva distinta a la que estamos sujetos a ver es un claro ejemplo y una demostración excelente de todo ello.

Stephen Hawking supo apreciar en su día la importancia de la astronomía y cosmología, y lo reflejó perfectamente en una de sus famosas citas que tanto me gusta:

"Solo tenemos una vida para poder disfrutar de este maravilloso universo, y es por eso que me siento enormemente agradecido."

Sin embargo, y como no es de extrañar cuando se discuten estas cuestiones un tanto metafísicas, si estas evidencias no tienen mayor difusión, se debe en parte a esas ideologías y doctrinas de carácter rígido que no muestran flexibilidad alguna. La flexibilidad es, sin lugar a dudas, una herramienta de incalculable valor para entender mejor el mundo en el que vivimos.